Quizás te haya pasado un par de veces donde crees que un problema de fontanería parece tener una solución rápida. Que puedes realizarla tú mismo, pero terminas con el agua casi hasta la cintura y no tienes ni idea de por qué.
Todos queremos solucionar y abordar proyectos por nuestra cuenta cada vez que podemos, sin embargo, los lavabos, inodoros y en general cualquier tubería tienen un potencial inmenso para causar un daño significativo a nuestra casa en general.
Esto se debe a que las fugas de agua pueden extenderse por todo el lugar o las filtraciones pueden pasar desapercibidas y causar un daño en nuestras paredes cuando ya es demasiado tarde.
Así que, antes de agravar la situación o convertir el problema en un desastre, lo mejor es llamar al profesional para que se encargue de la situación. Aquí te dejamos las 3 señales que te harán saber que necesitas llamar a un fontanero.
Nada mejor puede convertir un día maravilloso en una pesadilla como despertar y saber que no tenemos agua en casa. Lo primero que debemos hacer cuando esto ocurre es verificar con nuestros vecinos si ellos tienen el mismo problema o, si es solo tu casa, es hora de llamar a un fontanero.
No tener agua en casa es una de las señales o advertencias de que algo ha salido muy mal. Tuberías congeladas, fugas importantes, problemas con el suministro de agua son motivos para que no haya agua en casa.
Las fugas pueden causar daños estructurales muy significativos en la casa, incluso en los cimientos de estas. Asimismo acumular un gran número en tu factura de agua.
Un “simple” goteo de agua donde caen alrededor de 10 gotas de agua por minuto, pueden ser al año unos dos mil litros de agua. Quizás llevas un tiempo planeando arreglar ese goteo en la ducha y aunque lo has intentando el problema continúa.
En ocasiones un ajuste, cinta de fontanería y una nueva grifería sería suficiente para solventar el problema. Sin embargo, no es así en todos los casos. Un goteo puede provenir de una grieta en una tubería, o de una mala instalación de algún elemento.
Para solventar estos problemas lo mejor es contar con un fontanero para solucionarlo. Pues irá directamente sobre el problema y podrá resolverlo de raíz.
En ocasiones una obstrucción puede generar un olor terrible que impregna tu casa y que haga insoportable la permanencia en el lugar. Esta es una de las señales más claras de que tienes delante de ti un gran problema de fontanería.
No debes intentar pasar por alto el olor y arreglar tú el problema, porque puedes terminar empeorándolo todo. Es decir, podrías tener un olor más fuerte y durante más tiempo en casa. Pueden ser muchas las razones de esto, desde drenaje y tuberías mal ventiladas y obstrucciones.
Incluso algunos eventos climáticos pueden ocasionar daños a los sistemas de alcantarillas y bombas generando el problema. Es por eso que cuando algo vaya muy mal y huela muy mal es hora de llamar a los expertos.
¿Tienes que enfrentar un problema de fontanería y no sabes cómo hacerlo? En Fontanería Bizkaia nos encargamos de la instalación y mantenimiento de todo lo relacionado con la fontanería de tu hogar. Llámanos sin compromiso y te haremos un presupuesto ajustado para que tú no tengas que preocuparte de nada.
