Seguro que en más de una ocasión te has visto sorprendido con una fuga de agua en tu baño o simplemente desconocías su presencia. Esto es más habitual de lo que parece, especialmente si no has cerrado bien las llaves de paso o llevas mucho tiempo sin pisar tu vivienda. No son averías muy grandes: un inodoro mal sellado o un grifo que gotea, pero si van a afectar a nuestro bolsillo.
Si no quieres que tu factura de agua se dispare a fin de mes, te conviene aprender una serie de trucos para detectar posibles escapes y solucionarlos en el menor tiempo posible. Además de la repercusión económica las fugas pueden desencadenar daños en el resto de las instalaciones, llegando a convertirse en auténticas pesadillas para quienes las sufren.
En muchas ocasiones intentamos solucionar la fuga por nuestra propia cuenta sin disponer de las herramientas y tecnologías adecuadas, convirtiendo una simple gotera en un verdadero diluvio. Lo que en un principio podría ser una solución económica, con el tiempo puede convertirse en un problema de grandes dimensiones para nuestros bolsillos.
¡Que no cunda el pánico! Si ves que el problema persiste en tu hogar no dudes en solicitar ayuda a los especialistas de Fontanería Bizkaia, dispuestos a socorrerte en cualquier momento.